.
Hoy discutí con mi jefe y por un error que no cometí. Me llamó "tiro al aire" y me instó a prestar más atención. Más, de la demasiada que ya presto. "Tiro al aire", cuando voy a laburar con diluvio y hasta enfermo. Por supuesto, me sentí despreciado, desestimado, blah, ya que el error constó de dejar los candados del puesto colocados pero sin cerrar. No está de más aclarar que reviso al cerrar unas tres veces, ya que me he olvidado alguna que otra cosa y ha desaparecido, ya que el puesto está en el medio de la vereda. Ni hablar de que atiendo con una simpatía a prueba de bajones y que vendo, claro está. Me agradecen la atención, se rien, toman mate conmigo, me dan propina, vuelven. BLAAAAH. No obstante, mi jefe siempre minimiza mis acciones y ésta no fue la excepción: discutimos hasta que levanté la voz y me dijo, entre líneas, que por ser un hombre mayor que yo, merece respeto...
Este tipo, me trata a veces como si fuera un pibe de diez años. O su hijo. Y yo, de padres, estoy lleno pero, a la vez, vacío de agachadas de cabeza. Fue, no retrocedo más.
Y yo digo: nadie, pero NADIE puede obligarte a pensar que sos de X forma o decirte cómo tenés que ser. Este mundo está lleno de cretinos que te descalifican en todo lo bueno que hacés. O que lo ignoran pero que, cuando te equivocás, te lapidan. Y todo ése barullo que sale de sus bocas no es más que un mute que te ponen para que no seas distinto pero sí, igual de mediocres. Puede que no se den cuenta pero eso de discutir y creerse ellos los dueños de la verdad absoluta, no es más que humo que disimula una vida vacía de latidos.
Pero te arrastran, si los dejás.
Es por eso lo que dije que puntualizo ahora sobre la falta de respeto que me tienen cuando se confían demasiado de mi simpatía. Serán tiempos sensibles míos, me lo tomo muy en serio, qué se yo. Pero lo que sí se es que se confunden, que ésa misma simpatía no es razón para un comportamiento irrespetuoso. Y últimamente, aprendí más a calentarme que a ignorarlos, por ende...
Ojalá fuera al revés.
La verdad es que siguen viendo al cara de pendejo y no al Gabriel adulto, al que no traiciona, al leal y que trata de "usted". No. Ven solamente al pibe, al que sabe poco o se rie mucho, a un mediocre más, de esos que se sumergen en la muchedumbre y cambia de cara, todos los días.
Todos los días.
G
lunes, 9 de septiembre de 2013
jueves, 5 de septiembre de 2013
Sobre una copa de pesadilla
.
Anoche soñé con vos. Y doce horas antes, la tía me contaba que la fuiste a ver, un día después de mi visita. Amazing, simply amazing.
Para variar, te llevo a mis sueños y te sufro. Ésta vez, me rechazabas treinta veces, siquiera sin que yo insinuara algo pero lo hacías, como si hubieses poseído alguna vez el poder para decirme que no. Es psicológico, lo se. Sueño todo aquello que realmente es y siento que está fuera de mi alcance, pero jamás sueño sobre cosas que me hacen feliz, jamás. Es así como siempre formás parte de mi costado oscuro, el que siempre se atasca en el pasado nostálgico y el presente inerte.
No se qué estarás haciendo de tu vida y admito que sigo pensando en vos, cada día. Admito también que mi rencor va a durar años y que también se alimentó desde la primera vez que te fuiste, pensando que no hay algo peor que dar tu amor incondicional y que sólo piensen en las cosas malas que hacés. No te traicioné, no te vendí, no te toqué, no te puteé. Te defendí, siempre, de los demás... pero blah, no me quería estirar tanto.
En definitiva, quisiera ser tan apático como vos, que un día amás como la de siempre y, al siguiente, te metés en sueños y desnudás tu peor costado: el carente de dignidad.
G
Anoche soñé con vos. Y doce horas antes, la tía me contaba que la fuiste a ver, un día después de mi visita. Amazing, simply amazing.
Para variar, te llevo a mis sueños y te sufro. Ésta vez, me rechazabas treinta veces, siquiera sin que yo insinuara algo pero lo hacías, como si hubieses poseído alguna vez el poder para decirme que no. Es psicológico, lo se. Sueño todo aquello que realmente es y siento que está fuera de mi alcance, pero jamás sueño sobre cosas que me hacen feliz, jamás. Es así como siempre formás parte de mi costado oscuro, el que siempre se atasca en el pasado nostálgico y el presente inerte.
No se qué estarás haciendo de tu vida y admito que sigo pensando en vos, cada día. Admito también que mi rencor va a durar años y que también se alimentó desde la primera vez que te fuiste, pensando que no hay algo peor que dar tu amor incondicional y que sólo piensen en las cosas malas que hacés. No te traicioné, no te vendí, no te toqué, no te puteé. Te defendí, siempre, de los demás... pero blah, no me quería estirar tanto.
En definitiva, quisiera ser tan apático como vos, que un día amás como la de siempre y, al siguiente, te metés en sueños y desnudás tu peor costado: el carente de dignidad.
G
sábado, 31 de agosto de 2013
Experimento²
.
Ayer, fui a la parte de ajustes de mi teléfono y cuando vi la opción de "formatear" la memoria C:, apreté el botón. ¿Consecuencia? Se me borraron todos los contactos, todas las notas con direcciones y teléfonos que no quería tener en la agenda, todas las frases colgadas, todos los mensajes, casi todo de todo. No fue una situación fortuita, había metido mano e hice que el reproductor de música dejara de funcionar pero... sabiendo que formateando iba a recuperar la normalidad, sabía también que todo se iba a borrar... Sin embargo, apreté el botón igual.
Recuperé algunos, aquellos que guardaba el historial de Whatsapp y realmente, fueron pocos. Por el resto, la verdad, es que me alegro de no haberlos guardado. Acumulan polvo en mis teléfono y no soy de esos que esperan a que les sirva un número, no, la verdad es que no estoy en una etapa de mi vida en la que tengo ganas de esperar a que "alguien" sirva. Creo más conveniente decir que mi etapa consta de "observación", con un ojo clínico que no perdona. No más equivocaciones, no más elecciones al azar.
Y mencionado eso, quiero agregar dos experiencias a la cuestión, dos experimentos que llevé a cabo ésta semana que ya se termina. Constaban de levante, claro está, de esos que evalúan cuán oxidado estoy, algo bien estúpido (considerando de que mi ego está bien, recuperó sus cabales) pero bueh, algo tenía que hacer para matar el tiempo.
El primero resultó en un lugar al azar, para lo cual elegí el viaje en colectivo. Luego de la primer pregunta, la charla se volvió fácil y llevadera, encontrándome llenando huecos de charla que ella dejaba (al charlar con un desconocido que avasallaba en palabras) o porque simplemente le aburría de entrada o no tenía práctica. Rubia, de las que Margo quiere que levante. Reímos, mucho, resultó ser divertida una vez suelta. Pero, casi al final, en vez de pedirle su teléfono, le pregunté la edad. Le llevaba más de diez años. Le di las gracias por la charla, la saludé como si la conociera de siempre y me bajé, sin más trascendencia que el recuerdo de un buen momento de viaje.
El segundo, en el puesto. Una de las tantas miles de personas que se acercan preguntando una dirección y que tanto me cansan, que ya contesto que no tengo idea y que no soy del barrio. Pero, a ésta niña, le di charla y se quedó, riendo. Tenía el pelo castaño, los ojos dulces y una sonrisa que instaba a quedarse uno queriendo. Palabras triviales, que ser florista era nada del mundo, que ella trabajaba en una panadería y sabía lo que era el oficio de "vender" y tener esa picardía, etc. Nada del otro mundo. Again, cinco segundos de silencios y el "más allá" esperando. Bueno, la dejé ir, sin pedirle nada a cambio. Era un experimento, nada más.
Puede que me haya perdido algo pero...
Tengo la frescura para conseguir lo que me proponga, lo que sea. Sin embargo, con respecto a las mujeres, aún no me siento listo, aún me siento en etapa de "clavos" y prefiero que si existe una próxima relación, sea natural y no forzada. Por otra parte, mi cabeza aún no olvida y tortura, tengo mis malos ratos y aún no se cómo llevarlos sin estallar en ciclotimia. Es así que prefiero mantener la calma, soportar mis ataques y no elegir por "regalo" o "primera oportunidad", mientras mi cabeza se va asentando, calmando, curando o lo que fuere que tengo metido en ella y me tiene enfermo de intranquilidad.
Puede que también esté equivocado, pero ahora mismo, prefiero cuidar de la poca cordura que poseo. Y con un poco de histeriqueo, que no me viene mal para mantener la autoestima en alto.
Siempre la quise bien arriba, ya que en la mayor parte de mi vida me quise poco y me pasaron por encima.
G
Ayer, fui a la parte de ajustes de mi teléfono y cuando vi la opción de "formatear" la memoria C:, apreté el botón. ¿Consecuencia? Se me borraron todos los contactos, todas las notas con direcciones y teléfonos que no quería tener en la agenda, todas las frases colgadas, todos los mensajes, casi todo de todo. No fue una situación fortuita, había metido mano e hice que el reproductor de música dejara de funcionar pero... sabiendo que formateando iba a recuperar la normalidad, sabía también que todo se iba a borrar... Sin embargo, apreté el botón igual.
Recuperé algunos, aquellos que guardaba el historial de Whatsapp y realmente, fueron pocos. Por el resto, la verdad, es que me alegro de no haberlos guardado. Acumulan polvo en mis teléfono y no soy de esos que esperan a que les sirva un número, no, la verdad es que no estoy en una etapa de mi vida en la que tengo ganas de esperar a que "alguien" sirva. Creo más conveniente decir que mi etapa consta de "observación", con un ojo clínico que no perdona. No más equivocaciones, no más elecciones al azar.
Y mencionado eso, quiero agregar dos experiencias a la cuestión, dos experimentos que llevé a cabo ésta semana que ya se termina. Constaban de levante, claro está, de esos que evalúan cuán oxidado estoy, algo bien estúpido (considerando de que mi ego está bien, recuperó sus cabales) pero bueh, algo tenía que hacer para matar el tiempo.
El primero resultó en un lugar al azar, para lo cual elegí el viaje en colectivo. Luego de la primer pregunta, la charla se volvió fácil y llevadera, encontrándome llenando huecos de charla que ella dejaba (al charlar con un desconocido que avasallaba en palabras) o porque simplemente le aburría de entrada o no tenía práctica. Rubia, de las que Margo quiere que levante. Reímos, mucho, resultó ser divertida una vez suelta. Pero, casi al final, en vez de pedirle su teléfono, le pregunté la edad. Le llevaba más de diez años. Le di las gracias por la charla, la saludé como si la conociera de siempre y me bajé, sin más trascendencia que el recuerdo de un buen momento de viaje.
El segundo, en el puesto. Una de las tantas miles de personas que se acercan preguntando una dirección y que tanto me cansan, que ya contesto que no tengo idea y que no soy del barrio. Pero, a ésta niña, le di charla y se quedó, riendo. Tenía el pelo castaño, los ojos dulces y una sonrisa que instaba a quedarse uno queriendo. Palabras triviales, que ser florista era nada del mundo, que ella trabajaba en una panadería y sabía lo que era el oficio de "vender" y tener esa picardía, etc. Nada del otro mundo. Again, cinco segundos de silencios y el "más allá" esperando. Bueno, la dejé ir, sin pedirle nada a cambio. Era un experimento, nada más.
Puede que me haya perdido algo pero...
Tengo la frescura para conseguir lo que me proponga, lo que sea. Sin embargo, con respecto a las mujeres, aún no me siento listo, aún me siento en etapa de "clavos" y prefiero que si existe una próxima relación, sea natural y no forzada. Por otra parte, mi cabeza aún no olvida y tortura, tengo mis malos ratos y aún no se cómo llevarlos sin estallar en ciclotimia. Es así que prefiero mantener la calma, soportar mis ataques y no elegir por "regalo" o "primera oportunidad", mientras mi cabeza se va asentando, calmando, curando o lo que fuere que tengo metido en ella y me tiene enfermo de intranquilidad.
Puede que también esté equivocado, pero ahora mismo, prefiero cuidar de la poca cordura que poseo. Y con un poco de histeriqueo, que no me viene mal para mantener la autoestima en alto.
Siempre la quise bien arriba, ya que en la mayor parte de mi vida me quise poco y me pasaron por encima.
G
viernes, 30 de agosto de 2013
Malas influencias
.
Haber salido durante tantos años con una niña que al abandonarme, daba sexo a cambio de compañía me trajo varios problemas y me hizo dejar de lado la autoestima. Si hubo algo que siempre me caracterizó, fue el ego pero no de esos que se pasan de listos, sino el ego que eleva, que te provoca ganas de mejorar, tanto en uno mismo como en quienes influye. Pero no, por prestar más atención a ésta niña, toda mi estructura de integridad quedó relegada, a cambio de oportunidades que una y otra vez, fueron desaprovechadas.
Lo que me vino a la cabeza fue, justamente ése intercambio de "sexo por compañía", algo que atacó directamente al orgullo masculino. Uno lleva tiempo pensando que hace las cosas bien y se da cuenta de que da igual, que si bien está bueno que te digan "vos sos distinto", a la hora de las demostraciones, cada acción demuestra lo contrario. En éste mundo, se habla de tamaños, de desempeño y de tantas boludeces más que me tienen sin cuidado. Sin embargo, he caído más de una vez en esas "autocomparaciones" y me he rebajado de "status", comparándome con flacos que sirvieron solamente para sexo casual y nada más. No me considero mejor, lo saben, pero si "distinto" y al menos, un caballero, que no toma a una mujer para pasar el rato pero sí, para respetarla.
Eso no significa que sea un santo...
Jaja, "vos sos distinto". Es la peor frase para convencer a un hombre sobre sexo. Mejor no contestar, my ladies.
En fin.
A veces, no se porqué la gente hace ciertas cosas o toma tales decisiones, sin mirarse antes a sí mismos y preguntarse si quieren dar a mostrar una imagen así de sus personas, así como yo caí profundo y di una imagen de hombre sin dignidad, que nunca mereció ayuda ni atención.
Sigo pensando todos los días en ella, pero reprimo mucho y mientras, me compro libros. Antes de ayer me compré uno y juro que, hacía rato que no me daban ganas de sentirme bien.
G
Haber salido durante tantos años con una niña que al abandonarme, daba sexo a cambio de compañía me trajo varios problemas y me hizo dejar de lado la autoestima. Si hubo algo que siempre me caracterizó, fue el ego pero no de esos que se pasan de listos, sino el ego que eleva, que te provoca ganas de mejorar, tanto en uno mismo como en quienes influye. Pero no, por prestar más atención a ésta niña, toda mi estructura de integridad quedó relegada, a cambio de oportunidades que una y otra vez, fueron desaprovechadas.
Lo que me vino a la cabeza fue, justamente ése intercambio de "sexo por compañía", algo que atacó directamente al orgullo masculino. Uno lleva tiempo pensando que hace las cosas bien y se da cuenta de que da igual, que si bien está bueno que te digan "vos sos distinto", a la hora de las demostraciones, cada acción demuestra lo contrario. En éste mundo, se habla de tamaños, de desempeño y de tantas boludeces más que me tienen sin cuidado. Sin embargo, he caído más de una vez en esas "autocomparaciones" y me he rebajado de "status", comparándome con flacos que sirvieron solamente para sexo casual y nada más. No me considero mejor, lo saben, pero si "distinto" y al menos, un caballero, que no toma a una mujer para pasar el rato pero sí, para respetarla.
Eso no significa que sea un santo...
Jaja, "vos sos distinto". Es la peor frase para convencer a un hombre sobre sexo. Mejor no contestar, my ladies.
En fin.
A veces, no se porqué la gente hace ciertas cosas o toma tales decisiones, sin mirarse antes a sí mismos y preguntarse si quieren dar a mostrar una imagen así de sus personas, así como yo caí profundo y di una imagen de hombre sin dignidad, que nunca mereció ayuda ni atención.
Sigo pensando todos los días en ella, pero reprimo mucho y mientras, me compro libros. Antes de ayer me compré uno y juro que, hacía rato que no me daban ganas de sentirme bien.
G
domingo, 25 de agosto de 2013
Patrón de sociabilidad
.
Y así como me siento fuera de lugar, cuesta horrores acomodarse.
El principal problema es la imperfección. Hay puntos importantes que todos parecen ignorar, errores que suceden a diario y prefieren dejar pasar en pos de una vida más austera. Así es como una simple falta de preocupación resulta en una futura "perdón, tenía muchas cosas en mi cabeza y problemas con mi abuelita que...". Como así también el diálogo se pierde, como tantas veces me quejé y me voy a seguir quejando, que se empiezan las charlas y se dejan colgadas, simplemente se desvanecen las respuestas. Me la paso hablando solo o con la pared. No nos olvidemos de las acciones que se hacen a tus espaldas y que, al final, se justifican con un "es que no quería preocuparte" o algún tipo de mierda parecida. ¡MENTIRA! No tenés huevos para decir las cosas de frente o simplemente, nadie te enseñó a enfrentar las consecuencias. No sos una persona de fiar, digna de mi confianza.
Así, con todos y tan difícil.
No voy a negarlo: me cuesta mucho últimamente elegir con sabiduría mis compañías. Sin embargo, ésto me encierra y me vuelvo reacio a conocer gente nueva, porque los veo como potenciales imperfectos y la verdad, para crítico y no perfecto, ya me tienen. La realidad dicta que me he vuelto un amargado, un hosco, un ateo, alguien que ya no tiene fe en la gente pero... por otra parte, el costado intacto de éste tipo de oscuridad aún cree y crea conflictos internos, de esos que se traducen en histeria, mientras sigue esperando que alguien MUEVA UN PUTO DEDO y haga lo que tenga que hacer. Dios, me DESESPERA VER QUE LA GENTE HAGA TANTAS ESTUPIDECES O HABLE POR HABLAR, QUE HABLE Y NO MUEVA EL CUERPO. La gente habla y yo, me la paso echándole la culpa a Gabriel, siempre hago meaculpa con él, siempre se critica solo. Hasta disculpas pedí, de tantas veces que me torturé en éste blog. No es así, la rueda gira equivocadamente. Yo soy un caprichoso pero NADIE hace lo que tiene que hacer. Todo es una gran mentira, nadie tiene de diferente o maravilloso, son todos mediocres, lo juro.
¿Cómo voy a darles magia, así? ¿Para qué quieren lo mejor de mi? ¿Por una cuestión de deseo, nomás? ¿Así funciona el mundo hoy en día? Digo, deseando que el prójimo mejore, que le vaya bien, mientras uno mismo se preocupa por sí mismo. ¿Así funciona? ¿Ya nadie se arremanga? Yo también cuidé enfermos, yo también vi morir parientes, yo también agaché la cabeza, yo también fui traicionado, yo también me equivoqué, yo también quité, yo también perdoné, yo también fui mártir, yo también fui culpable, yo también creí ciegamente, YO TAMBIÉN, PUTA MADRE. Yo también todo eso y más pero, sin embargo, no me duermo en los laureles y sigo buscando, me arremango y si creen que hago poco, bueno, tienen razón pero reclámenle a las ganas y a la poca fe que me provocan.
La amistad no existe. Sí la confianza, el amor, la necesidad. Pero no la amistad.
Para qué me molesto, si siempre escribí para mí mismo, para nadie más. La gente me lee, me consta, pero es un hecho que hablo solo y que la paja es más importante que un simple "gracias" o "te leí". Ni hablar de compartir el pensamiento o discutirlo.
"The audience knows the truth: the world is simple. It's miserable, solid all the way through. But if you could fool them, even for a second, then you can make them wonder, and then you... then you got to see something really special..."
Esa frase define quien verdaderamente soy.
Screw you all.
G
Y así como me siento fuera de lugar, cuesta horrores acomodarse.
El principal problema es la imperfección. Hay puntos importantes que todos parecen ignorar, errores que suceden a diario y prefieren dejar pasar en pos de una vida más austera. Así es como una simple falta de preocupación resulta en una futura "perdón, tenía muchas cosas en mi cabeza y problemas con mi abuelita que...". Como así también el diálogo se pierde, como tantas veces me quejé y me voy a seguir quejando, que se empiezan las charlas y se dejan colgadas, simplemente se desvanecen las respuestas. Me la paso hablando solo o con la pared. No nos olvidemos de las acciones que se hacen a tus espaldas y que, al final, se justifican con un "es que no quería preocuparte" o algún tipo de mierda parecida. ¡MENTIRA! No tenés huevos para decir las cosas de frente o simplemente, nadie te enseñó a enfrentar las consecuencias. No sos una persona de fiar, digna de mi confianza.
Así, con todos y tan difícil.
No voy a negarlo: me cuesta mucho últimamente elegir con sabiduría mis compañías. Sin embargo, ésto me encierra y me vuelvo reacio a conocer gente nueva, porque los veo como potenciales imperfectos y la verdad, para crítico y no perfecto, ya me tienen. La realidad dicta que me he vuelto un amargado, un hosco, un ateo, alguien que ya no tiene fe en la gente pero... por otra parte, el costado intacto de éste tipo de oscuridad aún cree y crea conflictos internos, de esos que se traducen en histeria, mientras sigue esperando que alguien MUEVA UN PUTO DEDO y haga lo que tenga que hacer. Dios, me DESESPERA VER QUE LA GENTE HAGA TANTAS ESTUPIDECES O HABLE POR HABLAR, QUE HABLE Y NO MUEVA EL CUERPO. La gente habla y yo, me la paso echándole la culpa a Gabriel, siempre hago meaculpa con él, siempre se critica solo. Hasta disculpas pedí, de tantas veces que me torturé en éste blog. No es así, la rueda gira equivocadamente. Yo soy un caprichoso pero NADIE hace lo que tiene que hacer. Todo es una gran mentira, nadie tiene de diferente o maravilloso, son todos mediocres, lo juro.
¿Cómo voy a darles magia, así? ¿Para qué quieren lo mejor de mi? ¿Por una cuestión de deseo, nomás? ¿Así funciona el mundo hoy en día? Digo, deseando que el prójimo mejore, que le vaya bien, mientras uno mismo se preocupa por sí mismo. ¿Así funciona? ¿Ya nadie se arremanga? Yo también cuidé enfermos, yo también vi morir parientes, yo también agaché la cabeza, yo también fui traicionado, yo también me equivoqué, yo también quité, yo también perdoné, yo también fui mártir, yo también fui culpable, yo también creí ciegamente, YO TAMBIÉN, PUTA MADRE. Yo también todo eso y más pero, sin embargo, no me duermo en los laureles y sigo buscando, me arremango y si creen que hago poco, bueno, tienen razón pero reclámenle a las ganas y a la poca fe que me provocan.
La amistad no existe. Sí la confianza, el amor, la necesidad. Pero no la amistad.
Para qué me molesto, si siempre escribí para mí mismo, para nadie más. La gente me lee, me consta, pero es un hecho que hablo solo y que la paja es más importante que un simple "gracias" o "te leí". Ni hablar de compartir el pensamiento o discutirlo.
"The audience knows the truth: the world is simple. It's miserable, solid all the way through. But if you could fool them, even for a second, then you can make them wonder, and then you... then you got to see something really special..."
Esa frase define quien verdaderamente soy.
Screw you all.
G
domingo, 18 de agosto de 2013
Fuera de lugar
.
"... dejando huellas, como páginas de distintos libros, sin terminar."
Ésta época me confunde.
Antes que nada, voy a aclarar rápidamente algo: a partir de hoy, mis errores del pasado quedarán allí mismo, en el pasado; ya que he intentado en vano varias veces solucionar cometidos y las distintas vueltas de la vida no me lo han permitido. Visto y considerando de que no puedo vivir constantemente de recuerdos, decido no volver a postear en éste blog una opinión y a contínuación, una autocrítica. No me parece sano pero si, poco adherente a la autoestima.
Fin.
Ésta época me confunde.
Ya en mi adolescencia sabía qué tipo de persona quería ser: alguien bien alejado del egoísmo de mi apellido, una sangre buena para nada y contraproducente. Trabajé años en ello y logré resultados satisfactorios. No obstante, algo importante sobrevivió, el gen, el origen del mal.
Por otra parte, siempre detesté las relaciones por interés físico y pasajero. Siempre tuve levante, siempre me sobraron mujeres y oportunidades. Sin embargo, me tomé las cosas con calma y fui despacio, probando parejas, apostando fuerte y terminando las cosas, si era necesario y antes de que se volvieran confusas o nocivas para los dos. Cuando llegó la relación que luego se volvería la más intensa y extensa hasta el momento, me di cuenta de que llevaba tiempo preparado para pasar el resto de mi vida con una sola mujer. Aposté el todo por el todo, hasta me endeudé por los errores ajenos, di la cara, me peleé por ella con medio mundo, perdí la autoestima y hasta me volví un villano, un pelotudo que se bancó el forreo y perdonó traiciones. Incluso, que llegó a traicionar.
Todo eso no es novedad y ya lo he mencionado miles de veces, pero quise dejar constancia de la cantidad de cosas a las que me arriesgué, con tal de vivir la vida acompañado y acompañando. Todo lo que importa, para mí, lo que siempre importó... fue que me quisieran y respetaran, siempre. Y nada más.
Hoy en día, las cosas duran un tiempo, solamente y veo que la gente va y viene, sin mirar con quién se roza, con quién se rie, si compartió un trago con tal o cruzó un "hola" con cual. El placer físico predomina y la creación de oportunidades se vuelve más importante que la paciencia o el "tiempo significativo" que uno necesita para asentarse. Se vive a mil, no se trasciende, los besos son humo y los abrazos, parte de mitos y leyendas. No valoramos las cosas hasta que las perdemos y cuando sucede, dejamos que lave los platos la consciencia, para seguir marchando sin rumbo y siendo parte de una jauría que solamente piensa como tal: como animales.
Me desespero estando solo, no me gusta. Lo detesto. Me pone triste y los ojos se me aflojan, como vidrio de ventana bajo la lluvia. Me siento sonámbulo en ésta era contemporánea, porque creo en que el amor volverá pero cuando sea el momento indicado y sin embargo, veo que estoy rodeado de propaganda contradictoria, que me llena la cabeza de boludeces y me aplasta el corazón, cerrando el puño de la realidad sobre mí.
A veces, me elevo,
doy mil volteretas.
A veces, te encierro
tras puertas abiertas.
A veces, te cuento
porqué éste silencio.
Y es que a veces, soy tuyo
y a veces, del viento.
No se si me expliqué.
G
"... dejando huellas, como páginas de distintos libros, sin terminar."
Ésta época me confunde.
Antes que nada, voy a aclarar rápidamente algo: a partir de hoy, mis errores del pasado quedarán allí mismo, en el pasado; ya que he intentado en vano varias veces solucionar cometidos y las distintas vueltas de la vida no me lo han permitido. Visto y considerando de que no puedo vivir constantemente de recuerdos, decido no volver a postear en éste blog una opinión y a contínuación, una autocrítica. No me parece sano pero si, poco adherente a la autoestima.
Fin.
Ésta época me confunde.
Ya en mi adolescencia sabía qué tipo de persona quería ser: alguien bien alejado del egoísmo de mi apellido, una sangre buena para nada y contraproducente. Trabajé años en ello y logré resultados satisfactorios. No obstante, algo importante sobrevivió, el gen, el origen del mal.
Por otra parte, siempre detesté las relaciones por interés físico y pasajero. Siempre tuve levante, siempre me sobraron mujeres y oportunidades. Sin embargo, me tomé las cosas con calma y fui despacio, probando parejas, apostando fuerte y terminando las cosas, si era necesario y antes de que se volvieran confusas o nocivas para los dos. Cuando llegó la relación que luego se volvería la más intensa y extensa hasta el momento, me di cuenta de que llevaba tiempo preparado para pasar el resto de mi vida con una sola mujer. Aposté el todo por el todo, hasta me endeudé por los errores ajenos, di la cara, me peleé por ella con medio mundo, perdí la autoestima y hasta me volví un villano, un pelotudo que se bancó el forreo y perdonó traiciones. Incluso, que llegó a traicionar.
Todo eso no es novedad y ya lo he mencionado miles de veces, pero quise dejar constancia de la cantidad de cosas a las que me arriesgué, con tal de vivir la vida acompañado y acompañando. Todo lo que importa, para mí, lo que siempre importó... fue que me quisieran y respetaran, siempre. Y nada más.
Hoy en día, las cosas duran un tiempo, solamente y veo que la gente va y viene, sin mirar con quién se roza, con quién se rie, si compartió un trago con tal o cruzó un "hola" con cual. El placer físico predomina y la creación de oportunidades se vuelve más importante que la paciencia o el "tiempo significativo" que uno necesita para asentarse. Se vive a mil, no se trasciende, los besos son humo y los abrazos, parte de mitos y leyendas. No valoramos las cosas hasta que las perdemos y cuando sucede, dejamos que lave los platos la consciencia, para seguir marchando sin rumbo y siendo parte de una jauría que solamente piensa como tal: como animales.
Me desespero estando solo, no me gusta. Lo detesto. Me pone triste y los ojos se me aflojan, como vidrio de ventana bajo la lluvia. Me siento sonámbulo en ésta era contemporánea, porque creo en que el amor volverá pero cuando sea el momento indicado y sin embargo, veo que estoy rodeado de propaganda contradictoria, que me llena la cabeza de boludeces y me aplasta el corazón, cerrando el puño de la realidad sobre mí.
A veces, me elevo,
doy mil volteretas.
A veces, te encierro
tras puertas abiertas.
A veces, te cuento
porqué éste silencio.
Y es que a veces, soy tuyo
y a veces, del viento.
No se si me expliqué.
G
martes, 6 de agosto de 2013
Transición
.
"No hay comentarios"
Eso figura en mis últimos veinte posts, maso. Importa y mucho, que alguien diga algo pero es tan descarado el silencio que me causa gracia y tan obvia la culpa de quién, que no tengo derecho a réplica. Sin embargo, hago pucheros igual.
¿Qué tan importantes son las transiciones de pareja? ¿Cuántos errores estamos dispuestos a cometer con ajenos, con tal de sentir algo distinto y que nos haga arrepentir de haber perdido a un amor importante? ¿Cuánta vergüenza nos queda para admitir que nos equivocamos? ¿Solucionamos algo por pedir perdón?
Abundan los ejemplos y, hoy en día, siento que nací en una época equivocada, si a sentimientos se refiere uno. Hoy por hoy, las parejas existen pero el respeto se perdió, tanto como para el que se equivoca como para que de a ratos fue perfecto. Estamos llenos de villanos buenos y al final, cuando nos cansamos de ciertas circunstancias, buscamos una solución más extrema pero "necesaria", solamente para que al final sirva para peor, para terminar de romper las cosas y también, la dignidad propia.
Aún así, he observado que el mundo ignora fácilmente las guasadas que uno dice sin pensar.
Volviendo a una de mis primeras preguntas: las transiciones son lo más estúpido que he visto en mi vida y, sin embargo, son las mejores justificadas de todas... Se deja una persona y se pasa tiempo con otra, al mismo nivel de intensidad pero con las neuronas sin sanar para que al final, se termine abandonando todo nuevo intento y se vuelva con las parejas anteriores... Un ejemplo bien reciente y doble, me sirve de referencia para postear pero he vivido tantos que ya no los recuerdo todos y hasta quien escribe tuvo sus roces con el mal ejemplo, solamente que le salió todo peor... xD
Las transiciones me suenan a esos errores que cometemos y nos enseñan más que las cosas buenas o aprendidas de linda gana. Éste mundo es una contrariedad, madurar desde el punto de vista más grosero resulta mejor que ser mecido toda la vida por mi madre.
Transición de pareja: separarse de una relación duradera, conocer a alguien "transitivo", pasar tiempo con él, apostar con la misma intensidad que la anterior y darse cuenta de que no es lo mismo, perdiendo igual de mucho y volviendo con el rabo entre las patas. Prueba y error, todos felices.
Creo que mi ejemplo, fue el peor de todos.
G
"No hay comentarios"
Eso figura en mis últimos veinte posts, maso. Importa y mucho, que alguien diga algo pero es tan descarado el silencio que me causa gracia y tan obvia la culpa de quién, que no tengo derecho a réplica. Sin embargo, hago pucheros igual.
¿Qué tan importantes son las transiciones de pareja? ¿Cuántos errores estamos dispuestos a cometer con ajenos, con tal de sentir algo distinto y que nos haga arrepentir de haber perdido a un amor importante? ¿Cuánta vergüenza nos queda para admitir que nos equivocamos? ¿Solucionamos algo por pedir perdón?
Abundan los ejemplos y, hoy en día, siento que nací en una época equivocada, si a sentimientos se refiere uno. Hoy por hoy, las parejas existen pero el respeto se perdió, tanto como para el que se equivoca como para que de a ratos fue perfecto. Estamos llenos de villanos buenos y al final, cuando nos cansamos de ciertas circunstancias, buscamos una solución más extrema pero "necesaria", solamente para que al final sirva para peor, para terminar de romper las cosas y también, la dignidad propia.
Aún así, he observado que el mundo ignora fácilmente las guasadas que uno dice sin pensar.
Volviendo a una de mis primeras preguntas: las transiciones son lo más estúpido que he visto en mi vida y, sin embargo, son las mejores justificadas de todas... Se deja una persona y se pasa tiempo con otra, al mismo nivel de intensidad pero con las neuronas sin sanar para que al final, se termine abandonando todo nuevo intento y se vuelva con las parejas anteriores... Un ejemplo bien reciente y doble, me sirve de referencia para postear pero he vivido tantos que ya no los recuerdo todos y hasta quien escribe tuvo sus roces con el mal ejemplo, solamente que le salió todo peor... xD
Las transiciones me suenan a esos errores que cometemos y nos enseñan más que las cosas buenas o aprendidas de linda gana. Éste mundo es una contrariedad, madurar desde el punto de vista más grosero resulta mejor que ser mecido toda la vida por mi madre.
Transición de pareja: separarse de una relación duradera, conocer a alguien "transitivo", pasar tiempo con él, apostar con la misma intensidad que la anterior y darse cuenta de que no es lo mismo, perdiendo igual de mucho y volviendo con el rabo entre las patas. Prueba y error, todos felices.
Creo que mi ejemplo, fue el peor de todos.
G
Suscribirse a:
Entradas (Atom)